MITOS Y LEYENDAS DE MI PAIS-------

En pleno centro de Santiago, nada más entrar por la mampara de la Biblioteca Nacional, se rompe el mito de que los jóvenes "no están ni ahí". De dos en dos o en grupo, una seguidilla de estudiantes y adultos que suelen transitar por la sala Bicentenario se detiene esta vez frente a la Pincoya, el Trauco o la Voladora, recorren las vitrinas simples con información didáctica que hablan de costumbres ancestrales, relatos traspasados en torno al fogón y observan videos que delatan el trabajo sostenido y perseverante de una joven psicóloga que ahora se las ha ingeniado para demostrar de qué manera esa mitología que suena a creencias muy nuestras se relaciona directamente con los mitos de la cultura griega.Hacia el sentido de vidaNueve años lleva Margarita Ovalle, experta en religiones comparadas, investigando la mitología chilena. Es autora de varios libros, como "Leyendas clásicas chilenas", "Intimidad y multiverso" y "Lo extraordinario en lo ordinario. Visiones de mundo exhibido". Es asimismo fundadora de Museovivo, que desarrolla y registra en vivo y en directo -y luego atesora a través de su sitio web- encuentros e intercambios entre los más autóctonos portavoces culturales. A la par de este rescate de patrimonio intangible gracias a sus innumerables viajes y estadías por el territorio nacional, la estudiosa ha presentado en varios puntos del país exposiciones que comunican sus hallazgos sobre los principales mitos, graficados con esculturas del artista Andrés Vio.Esta vez, gracias al auspicio de Fundación Mustakis, se instala en la Biblioteca Nacional. Su mensaje se interna en el mito chilote en relación con los principales mitos griegos universales que se desprenden desde que el hombre comienza a preguntarse por su más íntimo sentido de vida.Para Margarita Ovalle, el mito "es la representación de lo más esencial del hombre", lo que identifica a un grupo cultural y a su vez lo que lo diferencia, lo que cambia de tiempo en tiempo y lo que permanece. Advierte que hoy, sin embargo, nos hemos encargado de connotar al mito como ficción, como relatos de lo iluso o sin sentido "y así mismo hemos vivido el sin sentido, la des-ilusión y la realidad de no reconocer o no recordar cuáles son los mitos que nos sustentan".Recuerda que desde sus comienzos el hombre busca explicarse las interrogantes existenciales frente al misterio como la ineludible realidad de hacer frente a nuestras necesidades más concretas y básicas todos los días. "Las culturas son las manifestaciones, las metáforas que expresan esos mapas humanos llamados mitos".En ese contexto, para la investigadora, la globalización no es más que la opción colectiva como personal de ir dejando atrás identidades más particulares del mito "y adherir a un gran monopatrón, monomapa de cómo enfrentar el mercado, las rutinas cotidianas, las prioridades y énfasis al hacer frente a la realidad".Ovalle ha comprobado in situ que los mitos chilotes están cargados de individualidad y no responden aún a este gran patrón monomito. Ello no quita que en esta cultura, como en la mayoría, sí existan arquetipos o temas humanos intrapsíquicos en torno a los cuales se forma el mito. "Lo que varía son sus interpretaciones frente a las cuales surgen investiduras culturales cargadas de identidad local". Por lo demás, aclara que los arquetipos son siempre actuales (nunca pasa de moda ser madre, ser héroe, ser sanador, ser comunicador, ser bufón o arlequín). "De hecho, siempre el arquetipo es colectivo, porque habla de esencias, de símbolos eternos en torno a los cuales gira el mito".Margarita Ovalle acaba de obtener el premio CAB ( Corporación Andrés Bello en Colombia) por su trabajo de rescate de patrimonio inmaterial. "Es muy importante, porque reconoce internacionalmente un trabajo muy invisible, que tiene que ver con la recolección de saberes, mitos, visiones de mundo que dan cuenta de una urdimbre simbólica nacional, la cual explica y da sentido a nuestras acciones más visibles".La propia psicóloga dictará talleres vivenciales el 31 de mayo (Día del Patrimonio) en la Biblioteca Nacional para sensibilizar a los estudiantes acerca de la presencia del mito en nuestra realidad cotidiana.Fundación MustakisEsta exhibición cuenta con el apoyo de la Fundación Mustakis como parte de su programa CHILEMITOS. La directora de Arte y Cultura de esa entidad, Alejandra Valdés, recuerda que el "contar", tan valioso en sociedades de antaño, se ha perdido como patrimonio. "Nosotros estamos en la vía de la recuperación, del contar no sólo por el tema de los mitos y la identidad, sino por la comunicación, el traspaso de sabidurías de una generación a otra, y también lo incluimos en nuestras actividades académicas porque incentiva el desarrollo del lenguaje y la capacidad de expresión"."Chile Mitológico"Lugar:Salón Bicentenario Biblioteca NacionalAv. LibertadorBernardo O'Higgins 651,Fecha: Hasta el31 de mayo.Entrada liberada.Mitos en Grecia y ChiloéSimilitudes existen entre los mitos chilotes y la mitología griega. Margarita Ovalle recuerda que en la antigua Grecia, y luego en Roma, está el dios Hermes o Mercurio, gran comunicador entre el Olimpo y los mortales. "Es el único mensajero enviado por el Olimpo con la misión de pedir a Hades en el submundo que devuelva a Perséfone o Proserpina a su madre Deméter, diosa de la fertilidad de la tierra. Si no lo hace, la tierra quedaría sin cosechas y fertilidad". En Chiloé, este arquetipo se repite en La Voladora, quien es enviada por los brujos a tomar una pócima de natri para así vomitar sus intestinos y convertirse en Bauda, el ave mensajera que comunica recados entre las islas. Asimismo, la investigadora compara a Millalobo (Chiloé) y Poseidón (Grecia). Ambos dioses de mares y océanos. También existe similitud entre Huenchula (Chiloé) y Perséfone (Grecia). Bellas hijas inocentes raptadas y transformadas en reinas de las profundidades. Por su parte, Huenchur en Chiloé y Deméter en Grecia son diosas-madres que buscan a sus hijas raptadas. "En su sentido íntimo, este mito es la representación simbólica de la historia del alma, de su descenso a la materia y los sufrimientos que provoca la pérdida de lo divino, de la abundancia de otrora". Y así como El brujo (Chiloé) y Orfeo (griego) son seres que transitan entre lo humano y lo divino, la realidad y misterio, también se relaciona La Pincoya de Chiloé con Afrodita, que nace en la isla de Chipre, renace de la espuma del mar y sobre una concha. Ambas son bellas del mar que traen fertilidad e inspiración.